PENTECOSTES.

357.- A los cincuenta días.- El Pentecostés judío en el Sinaí; el cristiano, en el Cenáculo.- El proyecto de DIOS es hacer de todos los hombres un pueblo unido y de esa creación dispersa, un cosmos, un mundo ordenado. El Espíritu Santo de DIOS, que hizo surgir la creación, la consumará, mediante la redención y santificación. El transforma el corazón del hombre y le impulsa a entablar una relación fraterna. Gracias al Espíritu de Jesús ha surgido la Iglesia entre nosotros; vive en ella como el alma en el cuerpo, y por El nos mantenemos en la fe y en la comunión.-

358.- En Génesis 11 vemos cómo DIOS confunde la soberbia humana con la confusión de las lenguas.- Se llamó Babel, porque allí confundió el Señor la lengua de toda la tierra.- Han pasado muchos siglos, y vemos en el 20 después de Cristo, que el gigantismo técnico y científico acompaña al raquitismo moral y espiritual de muchos, y por eso vemos los contrastes tan tremendos de gente muy culta, de muchos estudios y conocimientos humanos, pero una ignorancia fenomenal en materia moral y religiosa, y junto asea ignorancia, los tremendos desórdenes que llevan a la esclavitud del sexo, del dinero, del poder, de la ambición, de la apariencia y falsedad, de la rebeldía, de la confusión. Como si todas las fuerzas del Infierno andaran libres por la tierra. Sabemos que están controladas, y que no pueden hacer todo lo que quisieran.

359.- En el Éxodo 19 vemos como el Señor baja al monte Sinaí a la vista del pueblo, y nos da sus Mandamientos, el mejor programa que se haya podido pensar en materia religiosa, moral, social y económica para la convivencia y desarrollo de la humanidad en la tierra y para la conquista del Cielo. DIOS Creador, por puro amor, no nos deja caídos en el pecado y presenta su programa de salvación, ya anunciado en el Génesis, apenas ocurrido el pecado; el llamado protoevangelio que es el comienzo de la Historia de la Salvación y que llegará a su cúlmen en la venida gloriosa de Jesucristo al final del mundo.- Mientras tanto, seguimos buscando la mayor santidad posible, como nos lo pide DIOS desde los comienzos, y la Iglesia lo hace posible si le somos fieles.

360.- En Ezequiel 37 vemos la acción de DIOS por el profeta sobre aquellos huesos secos. ¡Huesos secos! Os infundiré mi Espíritu y viviréis.- No tenemos problema si creemos que DIOS lo puede todo. Que es más fácil para Él hacer que lo que ya existió vuelva a ser, que el crear de la nada por primera vez, aunque todo es fácil para quien es Todopoderoso.- Hay gente que no creen en la resurrección y se conduelan con la reencarnación; consuelo muy pobre y absurdo al verlo con la visión personal de la luz de DIOS. Somos personas, un cuerpo y
un alma, animales racionales; cuerpo mortal con alma inmortal.- Maravillosas las palabras de Jesús al hablar de la Eucaristía en San Juan 6,54: para el alma, la vida eterna, y para el cuerpo, la resurrección en el último día.

361.- En Joel 2, se nos anuncia: sobre mis siervos y mis siervas derramaré mi espíritu.- Y Viene con toda su riqueza divina, los siete Dones, para que podamos dar esos frutos del Espíritu de que nos habla San Pablo en Gálatas 5.- La luz y fuerza divina que eleva nuestra alma a las alturas más grandes del espíritu, y da pleno sentido a toda nuestra vida y actividad, con vistas a la Eternidad.

362.- En los Hechos de los Apóstoles 2 tenemos el relato del Pentecostés cristiano con todas las maravillas que realiza en los Apóstoles y discípulos que habían perseverado en oración con la Virgen: se llenaron todos del Espíritu Santo y empezaron a hablar de las maravillas de DIOS; y todos, de 16 países, les entendían en su propia lengua; y creyeron, y se bautizaron tres mil.- Eran los primeros pasos de la Iglesia Católica, que ya no se detendrán hasta el fin del mundo.-

363.- En la carta a los Romanos 8,22, San Pablo nos habla del Espíritu que intercede por nosotros con gemidos inefables; son las maravillas que en las secuencias al Divino Espíritu recordamos todos los sábados en la tarde, cuando pedimos a la Virgen que nos lo atraiga más plenamente, en ayuda para nuestra debilidad, y plenitud para nuestras limitaciones.

364.- San Pablo nos habla también en la 1ª carta a los Corintios 12, de que hemos sido bautizados en un mismo Espíritu, para formar un solo cuerpo; el gran cuerpo místico, misterioso, de Cristo, en el que cada uno tenemos nuestra misión.- Hechos hijos de DIOS, miembros de la Iglesia, por la Confirmación somos hechos soldados, y por el Orden Sagrado, Ministros.- Maravilloso programa el de Jesucristo, al que ha querido llamarnos para colaborar, y que debemos hacer con toda generosidad; trabajamos a largo plazo, para la Eternidad, con total garantía de triunfo.

365.- En San Juan 7,37 nos dice Jesús que si creemos en El de nuestras entrañas manarán torrentes de agua viva, la única que nos puede saciar plenamente.- Y en San Juan 20,19, nos anuncia Jesús: Como el Padre me ha enviado, así también os envío yo. Recibid el Espíritu Santo; a quienes perdonéis los pecados le quedan perdonados, a quienes se los retengáis, le quedan retenidos.- Maravillosa transmisión de poderes: bendecir, perdonar, consagrar; estaré con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Jesús que sale del Sagrario, viene a nosotros en la Eucaristía, y nos acompaña en los trabajos e cada día y en cada lugar.

366.- Y con la Virgen, esposa Inmaculada del Espíritu Santo, cantamos en el Prefacio: Pues, para llevar a plenitud el misterio pascual, enviaste hoy al Espíritu Santo sobre los que habías adoptado como hijos por su participación en Cristo. Aquel mismo Espíritu que, desde el comienzo, fue el alma de la Iglesia naciente; el Espíritu que infundió el conocimiento de DIOS a todos los pueblos, reunidos en Jerusalén; el Espíritu que congregó en la confesión de una misma fe a los que el pecado había dividido en diversas lenguas. Y el mismo Espíritu que sigue vivificando a tu Iglesia, e inspira a todos los hombres de buena voluntad que buscan tu Reino.- ¡Ven!, ilumínanos, fortalécenos, llena de amor nuestros corazones.